Si en nuestra cultura es común hablar de los «idus de marzo», como una fecha fatídica y de la que cuidarse, los laboralistas tenemos que hablar de las «calendas de abril», del primer día de este mes, que es cuando la reforma producirá finalmente todos sus efectos, al entrar en vigor la regulación de los contratos temporales. Desde la aprobación del RDL 32/2021 hasta entonces el Gobierno ha aprovechado para ir desarrollando normativamente algunas de las figuras centrales del nuevo modelo laboral, en particular las relativas a la flexibilidad interna, la gran apuesta de éste.
Sobre esta cuestión Miguel Rodríguez-Piñero Royo, colaborador de este portal, en colaboración con María Eugenia Guzmán y Marc Carrera, abogados de PwC Tax & Legal, han preparado un Periscopio Legal y Fiscal que acaba de publicarse, accesible en el siguiente enlace
