M.E.: Preguntada por las cuestiones anteriores, ¿podría describir las evidencias que legitiman la lectura de la historia del primer periodismo en Écija desde la lógica local-paneuropea?
C.E.: Mirar la historia del periodismo desde Écija, como desde cualquier otro espacio y tiempo concreto, permite revelar las tensiones y contradicciones inherentes a cualquier proceso tecnológico y cultural: en Écija los impresos informativos de la Edad Moderna sirvieron sobre todo para legitimar los micropoderes locales –eclesiásticos, nobiliarios, profesionales…- enzarzados en una estrategia constante de reivindicación. Las noticias lo fueron cuando, y en la medida que, interesaban a los fines estratégicos de estos poderes locales. Pero, a la vez, es fácil imaginar que esta multiplicidad de voces que narraban e informaban, insertas en sus redes clientelares y siempre dispuestas al debate y la polémica, abrieron grietas por las que pudo deslizarse una cierta opinión pública, crítica con estos y otros poderes.
"Mirar la historia del periodismo desde Écija,[...] permite revelar las tensiones y contradicciones inherentes a cualquier proceso tecnológico y cultural: en Écija los impresos informativos de la Edad Moderna sirvieron sobre todo para legitimar los micropoderes locales –eclesiásticos, nobiliarios, profesionales…- enzarzados en una estrategia constante de reivindicación".
M.E.: En sus trabajos científicos, particularmente en su aportación al volumen que coordinó con el historiador francés Roger Chartier: La aparición del periodismo en Europa. Comunicación y propaganda en el Barroco (2012), se entrecruzan dos premisas de estudio: desde el punto de vista de la estrategia comercial que “hace” al género y/o modelos, se enfrenta “lo serio” a “lo popular”; y desde el punto de vista de la estructura del mercado, se enfrentan “el centro” a “las periferias”, a sabiendas de que hay periferias que pudieran engendrar lógicas e innovaciones que presuponemos a los centros. ¿Qué aportaciones pronostica que pueda arrojar el proyecto HICPAN?
C.E.: Con toda humildad pero también con mucha ilusión, el proyecto HICPAN puede aportar básicamente el resultado de un estudio en profundidad de la historia del periodismo andaluz hecha desde los propios documentos y desde y con la misma gente que produjo ese periodismo. Esta reducción de foco esperamos que permita alumbrar un conocimiento profundo capaz de disipar errores –algunos de ellos repetidos de monografía en monografía- y conocer las lógicas propias de la producción periodística andaluza: lo popular, lo periférico y otros tantos tópicos historiográficos serán revisados para hallar en ellos las razones específicas por las que en nuestra tierra fueron operativos, y para qué o para quién lo fueron.