© Octavilla lanzada por el Sindicato con el objetivo de instruir políticamente a los trabajadores y de combatir el caciquismo electoral. Fuente: documento cedido por la familia Chaparro.
En este insólito despliegue de medios impresos, el Sindicato apeló también al eslogan electoral, aunque fuera aún de manera muy primitiva, para completar su campaña de educación política. Por medio de pequeñas octavillas o papeletas, repartidas de mano a mano, difundía entre los obreros unas consignas que, por su brevedad y su contundencia, éstos llegaban a memorizar: «Vender el voto es vender la dignidad. Debemos, por tanto, combatir a los tiranos que quieran comprarlos» o «Votando a Egocheaga tendrá el obrero quien lo defienda en el Parlamento. ¡Hombres libres, votad!». Era también una forma muy eficaz de recordarles quiénes eran sus enemigos: «Ningún director de Compañía os dirá: Votad a Egocheaga. Esto sólo debe bastar a los obreros para votar a su candidato»; pero también los caciques, los esquiroles o la Iglesia: «Ningún cura, fraile o monja os dirá: Votad a Egocheaga». Y era también una oportunidad para pedir el voto no solo a los mineros, sino también a los campesinos y agricultores, a los comerciantes e industriales, a los empleados y la clase media, indispensables si quería ganar las elecciones.
Egocheaga irrumpía en el campo mediático el 4 de marzo, a sólo cinco días de las elecciones. Y lo hacía con una hoja suelta, titulada «A mis electores», en la que se dedicaba a explicar sus promesas electorales.
"Quiero examinar la total propiedad de la Empresa, el pago de impuestos al Tesoro y a los Registros de la propiedad. Quiero saber cómo la Compañía adquirió esta propiedad y por qué ley del Estado es dueña del suelo de Riotinto. (…) Quiero revisar la cuestión de los humos, la tragedia del 88 y los hundimientos de Riotinto. Quiero desempolvar archivos y conocer los misterios, las ilegalidades cometidas, los atropellos realizados y la intervención de la Compañía en los organismos populares de la región[11]".
[11] AFRT. Legajo 1838. A mis electores. Eladio Fernández Egocheaga. Riotinto, 4 de marzo de 1914.