El siguiente resultado se enmarca en el contexto de la subida al trono de Carlos IV, que abrió posibilidades para la práctica de la libertad de expresión. Los sevillanos usaron estas posibilidades con el fin de reivindicar reformas más comprometidas, aunque pronto habrían de vérselas con los defensores del inmovilismo.
© Una de las piezas manuscritas por Francisco de Alvarado conservadas en el Fondo Antiguo de la Biblioteca Rector Machado y Núñez de la Universidad de Sevilla.
La investigadora del equipo HICPAN, Mª. del Carmen Montoya Rodríguez, profesora de la Universidad de Sevilla, ha abordado estas dualidades en la Sevilla de la Ilustración en el artículo publicado en la revista Cuadernos Jovellanistas. De la Ilustración a la Modernidad (2020). El objetivo de este nuevo trabajo es presentar una serie de papeles inéditos del famoso polemista Francisco de Alvarado, futuro Filósofo Rancio en las Cortes de Cádiz y uno de los pilares del pensamiento reaccionario en los comienzos del siglo XIX. El hallazgo de estas piezas manuscritas del dominico, que se conservan en dos volúmenes de varios en el Fondo Antiguo de la Biblioteca Rector Machado y Núñez de la Universidad de Sevilla, permite llenar una laguna en su biografía y su producción, que va desde la publicación de las Cartas de Aristóteles en 1787 y sus cartas de 1812.
Los títulos rescatados por la profesora Montoya se inscriben en la polémica que los universitarios sevillanos mantuvieron con Alvarado a propósito de las celebraciones festivas que tuvieron lugar en la ciudad a propósito de la proclamación de Carlos IV. Con su característico tono humorístico y festivo, Alvarado se muestra aquí ante sus enemigos como un cruzado contra la modernidad, defensor a ultranza de la escolástica y contrario a la reforma de la educación superior.
El acercamiento a estos papeles abre enormes posibilidades para la revisión historiográfica del discurso festivo durante el reinado de Carlos IV. A diferencia de la visión de la fiesta que presenta la propuesta erudita de las relaciones festivas, bien conocida, estos textos polémicos, a veces hirientes, cínicos o malintencionados, pero siempre vivos y espontáneos, permiten contemplar el hecho festivo en toda su grandeza, con las posibilidades expresivas que ofrecen a unos ciudadanos que claman por hacerse oír. Estos duelos de pluma son ya una conquista de la opinión pública, y lo son desde mucho antes de 1808.