23. AURELIA COTA

Aurelia fue una matrona romana que vivió entre los siglos II y I a. C. Era integrante de la ilustre familia de los Aurelii, varios de sus miembros, incluido su padre, Lucio Aurelio Cota, fueron cónsules. Su madre, Rutilia, también pertenecía a una prestigiosa familia. Aurelia estaba casada con Cayo Julio César y es conocida sobre todo por ser la madre del famoso Julio César, conquistador de la Galia y dictador de Roma. También tuvo dos hijas, llamadas Julia, siendo una de ellas la abuela del emperador Augusto.

La información que las fuentes antiguas han dejado sobre Aurelia es unánime al presentarla como una mujer muy respetada, considerada un modelo de virtud. También tuvo un papel muy importante en la crianza de sus hijos, especialmente con la de César. La relación entre ellos siempre fue muy cercana, hasta el punto de que se quedó a vivir con él tras la muerte de su esposo y contribuyó a la educación de su nieta, Julia. Al pertenecer a una familia de gran importancia en Roma, Aurelia contó con una gran influencia y contactos.

Roma

Cuando el dictador Lucio Cornelio Sila obligó a César a repudiar a su esposa Cornelia, por el parentesco de esta con los leales a Cayo Mario, César prefirió negarse y partir al exilio. Fue Aurelia la que intercedió a favor de su hijo, buscando ayuda para evitar su ejecución y facilitar su posterior regreso.

Otro episodio muy conocido y en el que Aurelia estuvo implicada tuvo lugar en el año 62 a. C., durante la celebración del festival de la Bona Dea. Esta divinidad tenía un culto mistérico de carácter exclusivamente femenino. Se celebraba anualmente en la casa del magistrado que más votos había recibido durante su elección, siendo ese año Julio César. Pompeya Sila, segunda esposa de César, debía ejercer de anfitriona, contando con la supervisión de Aurelia y la presencia de las vestales. Ese año Publio Clodio, consiguió infiltrarse disfrazado de mujer, al parecer con el objetivo de ver a Pompeya. Descubierto por una esclava, el escándalo de tal sacrilegio no tardó en extenderse por toda la ciudad. Aurelia ordenó tapar durante la fiesta las imágenes de la diosa para que Clodio no pudiese verlas y llegó a testificar contra él en el juicio. Además, debido a este episodio, César repudió a Pompeya, según Dion Casio bajo la excusa de que “la mujer prudente no sólo debe estar libre de culpa, sino a salvo de cualquier sospecha infamante”, lo que terminó dando lugar a la actual frase de que la esposa del César no sólo debe serlo, sino parecerlo.

Aurelia fue ante todo un modelo de matrona, un ejemplo de inspiración por su prudencia, modestia y fidelidad a las costumbres romanas, ejemplar esposa y mejor madre y abuela. Gracias a sus excelentes orígenes familiares y la fulgurante carrera de su hijo, fue una mujer muy influyente y poderosa, con capacidad de decisión y supervisión, y cuya opinión era tenida en cuenta tanto por el resto de matronas como por los propios hombres.

Antonio Fajardo Alonso

Universidad de Sevilla

Sir Lawrence Alma-Tadema (1891). Temprano paraíso. Colección privada.

Fuentes principales

Cicerón, Cartas a Ático, 13.

Plutarco, Vidas paralelas, Julio César, 3.

Suetonio, Vida de los doce césares, Cayo Julio César, 74.

Tácito, Diálogo de los oradores, 28.

Selección bibliográfica

Cabrero Piquero, J., Julio César: el hombre y su época (Madrid 2004).

Everitt, A., Cicerón (Barcelona 2007).

Goldsworthy, A., César (Madrid 2007; 1º ed. en inglés Newhaven).

Jeffrey Tatum, W., The Patrician Tribune: Publius Clodius Pulcher (Chapel Hill 1999).