Uno de los retos actuales en nuestro país es el creciente número de adolescentes que experimenta altos niveles de estrés escolar, especialmente durante la etapa de Secundaria. Además, el número de horas dedicadas a la realización de deberes en comparación con otros países ha suscitado un continuo debate. Si algo sabemos sobre el estrés escolar es que es un fenómenos complejo, para cuya comprensión es necesario atender a una amplia diversidad de factores, tanto individuales, como familiares y escolares. Es fundamental también prestar atención a las diferencias de género en los niveles y evolución del estrés escolar en el alumnado y ahondar en los factores que subyacen a las mismas.
El Proyecto EASE, «El estrés escolar en el alumnado de Secundaria en España. Un estudio mixto orientado al desarrollo de claves de actuación en el contexto familiar y escolar» (PID2019-105463RA-I00), realizado entre los años 2020 y 2024 supuso un primer acercamiento a responder a las necesidades anteriores. Se trata de un proyecto de investigación que dio voz al propio alumnado para comprender sus experiencias de estrés escolar y los factores que contribuyen a aliviarlo o acentuarlo. Los hallazgos clave y recomendaciones para el abordaje del estrés derivadas de este proyecto fueron puestos a disposición de los centros educativos y las familias, con la voluntad de promover el bienestar del alumnado de Secundaria.
El Proyecto EASE-B, «Identificado claves para la reducción del estrés escolar en los alumnos y las alumnas de secundaria y para la promoción de su bienestar en el ámbito educativo» (PID2023-146179OB-I00), que se inicia en septiembre de 2024, supone dar un paso más allá, para ahondar en las relaciones entre estrés y bienestar en el ámbito educativo y apoyar las actuaciones de los y las coordinadores de bienestar y protección. Para ello, el proyecto se apoya en tres pilares: (1) un análisis fundamentado en la realidad y necesidades de los centros detectadas por las áreas de coordinación de bienestar y protección, (2) la incorporación un abordaje multidimensional e integrador para la evaluación del estrés y el bienestar en el ámbito educativo y (3) un enfoque que sitúa las diferencias de género en el centro de la comprensión del estrés y bienestar en la etapa de educación secundaria. Los resultados del proyecto, en el que está prevista la participación de coordinadores de bienestar y protección y alumnado de secundaria, además de contribuir al avance científico sobre las temáticas abordadas, permitirán elaborar un toolkit de recursos útiles y fundamentados en la evidencia que apoye el trabajo de los y las coordinadores de bienestar y protección en las áreas prioritarias identificadas.