Justificación

Las ciudades andaluzas del siglo XX se enfrentan a cambios importantes en su estructura social y económica, hecho que justifica la necesidad de investigar sobre políticas que aseguren el derecho a la vivienda, y que favorezcan la cohesión e integración social y la convivencia en armonía los estudios demográficos auguran un notable aumento de la población mayor de 65 años en el futuro, previendo se duplique en 2040, y una disminución de la población en edad activa contribuyente a la financiación de la Seguridad Social (salud y protección social), cuestiones que nos dirigen a la necesidad de diseñar mecanismos y estrategias que persigan cierta autonomía del ciudadano en materia de financiación de las estructuras básicas que garantizan su calidad de vida.

El envejecimiento de la población influye negativamente en la conservación de los cascos históricos y barrios periféricos, las dificultades de financiación de obras de reparación, unidas a las físicas para acometer las simples labores de mantenimiento, favorecen el deterioro progresivo de los inmuebles y sus entornos Además, en la medida en que el mayor comienza a tener dificultades de movilidad y autonomía, abandona su vivienda y se traslada a entornos protegidos (casa de un familiar o una residencia), generándose en la ciudad bolsas de inmuebles vacíos, en deterioro progresivo los mayores de 65 años constituyen un grupo social singular, porque forman parte de la red de apoyos con la que cuentan las personas en edad activa, porque generan riqueza y empleo ya que son consumidores de actividades de ocio, pero también por su vulnerabilidad: son individuos jubilados, mayoritariamente mujeres, que hacen uso de la ciudad y sus infraestructuras durante el día en su doble vertiente de usuarios de actividades culturales, deportivas, educativas y de ocio, y de cuidadores de niños pequeños y personas con movilidad reducida la singularidad de este grupo poblacional justifica la necesidad de diseñar estrategias que avalen la implementación de las políticas sociales que en la actualidad se enfocan hacia dos líneas prioritarias que promueven:

  • El envejecimiento activo, fomentando la participación del mayor en actividades profesionales, culturales, educativas, y físicas, que aseguran una mayor calidad de vida y aminoran los efectos negativos de los síntomas o alteraciones propias del proceso de envejecimiento las personas mayores que se mantienen activas, física y mentalmente, previenen la posible aparición de enfermedades asociadas a la edad .
  • El envejecimiento en casa en condiciones de dignidad, valorando la autonomía de las personas y prestando apoyos y recursos asistenciales estatales en caso de necesidad mediante programas de asistencia a domicilio a mayores y sus cuidadores.

Este proyecto ofrece, desde el punto de vista social, la oportunidad de implementar y desarrollar estrategias de análisis e intervención para promover la calidad de vida de los individuos, en especial de las personas mayores Sus recursos económicos disminuyen pero no las posibilidades de seguir contribuyendo a la sociedad a través de las relaciones intergeneracionales, actividades de voluntariado, etc , que contribuyen al envejecimiento activo las políticas sociales necesitan de articular nuevas pautas habitacionales en los inmuebles, que si bien pueden incorporarse de una forma natural en los nuevos crecimientos, en las áreas urbanas consolidadas necesitan del establecimiento de nuevos sistemas de gestión e intervención que permitan su viabilidad con cierta autonomía de las administraciones públicas.

Los Planes de Acción de ahorro y eficiencia energética incluidos en las agendas políticas de los países europeos, incluyen el objetivo para 2020 de ahorrar un 20 el consumo energético, y establecen la necesidad de implementar estrategias para la mejora de la eficiencia energética en el sector de la Edificación, contemplando medidas relacionadas con la rehabilitación energética en edificios existentes.

La ley 8/20l3 de 26 de junio de Rehabilitación, Regeneración y Renovación urbanas, considera la obligatoriedad de los propietarios de inmuebles ubicados en edificaciones con tipología residencial de vivienda colectiva, de disponer del informe de Evaluación de Edificios, en el que se exponga el estado de conservación del edificio, su adecuación a las condiciones básicas de accesibilidad universal, y se incluya el certificado de eficiencia energética del edificio.

El proyecto que presentamos, titulado «(Re) habitación+(Re) generación+(Re) programación.

El reciclaje y la gestión sostenible del parque edificado andaluz Gestión de entornos habitables desde criterios de envejecimiento activo, género y habitabilidad urbana», del equipo investigador (Re)Programa, tiene un marcado carácter integrador, articulando medidas sociales, ambientales y económicas.