BOMBA ASPIRANTE

    FÍSICA DE LA VIDA COTIDIANA: BOMBA HIDRÁULICA

Mª Ángeles Delgado Martínez

Centro de Estudios sobre la Memoria Educativa. Universidad de Murcia

mangdelgado@gmail.com

Imagen: Bomba mixta (aspirante-impelente). IES Ibáñez Martín (Lorca).

Centro de Estudios sobre la Memoria Educativa (CEME). Universidad de Murcia.

Entre los instrumentos científicos con que contaba el Instituto que hubo en Lorca entre 1864 y 1883 figuraba la bomba hidráulica de la fotografía. Cuando llevamos a cabo su restauración y puesta en funcionamiento, invitamos al resto del profesorado a que acudieran a verlo. Nos encontramos con que se repetía un hecho, en mayor medida en el profesorado más veterano: al hacer funcionar la bomba y provocar la salida del líquido por el surtidor, empezaban a aflorar recuerdos de su infancia, cuando iban a la tienda de ultramarinos a comprar aceite o vino, el tendero movía la palanca y el recipiente se llenaba como por arte de magia. Ese recuerdo nos sirvió para diseñar una actividad con el alumnado que se enmarcó dentro de lo que entonces se llamaba Ciencia, Tecnología y Sociedad y en la que tratábamos de poner de manifiesto como la ciencia forma parte de la vida cotidiana aportando soluciones a problemas existentes en la sociedad en cada momento.

 

Este aparato fue adquirido por el Instituto lorquino en el curso 1866-67, según consta en la Memoria correspondiente a ese año. Por aquel entonces las mujeres no tenían acceso a estudios científicos de ningún tipo, ni por supuesto podían acudir a los institutos. Las Ciencias Físico-Naturales no formaban parte del currículum escolar de las niñas y tampoco de los estudios de maestra. Eso no significa que las mujeres no tuvieran conocimientos prácticos de ciencias, las tareas del hogar conllevan un sinfín de procedimientos relacionados con la física y la química. No solo de presión en fluidos y los efectos que ocasiona su variación -lo que evidencia la bomba hidráulica-, también de mecánica, óptica, calorimetría…Podríamos decir que en la vida cotidiana de las mujeres siempre han estado presentes las Ciencias Físico-Naturales.

Precisamente ese aspecto de relación con la cotidianeidad es lo que propició que las ciencias comenzaran a formar parte de programas de estudios para mujeres. Eso sucedió por primera vez en nuestro país en la Escuela de Institutrices de Madrid, creación de la Asociación para la enseñanza de la mujer, donde el profesor de la Universidad Central Gumersindo Vicuña impartió durante el curso 1872-73 unas lecciones de Física que recogió en el texto Elementos de Física al alcance de todo el mundo. El profesor Vicuña explicaba en el prólogo que su intención era la de presentar los principios fundamentales de la Física y sus aplicaciones más notables a los usos de la vida, las artes y la industria. Añadía además que deseaba ilustrar a las personas adultas de ambos sexos que no podían considerarse cultas si no estaban al menos iniciadas en el conocimiento de las ciencias.

En lo que respecta a los estudios oficiales para mujeres, las ciencias no formaron parte de los programas hasta finales del siglo XIX en el caso de las maestras, y principios del XX en la escuela primaria para niñas. Y siempre con ese aspecto doméstico, de relación con la vida cotidiana en contraposición a la ciencia que se postulaba para los varones, abstracta, elevada, difícil de razonar y de entender. En este contexto tiene mucho sentido la idea que expresó Margarita Comas en su obra La coeducación de los sexos (1931) acerca de que había que integrar aspectos de las escuelas femeninas y de las masculinas para conseguir una escuela verdaderamente educadora.

Resulta paradójico que en la actualidad la enseñanza científica tienda a hacer hincapié en su relación con la vida y el entorno de alumnos y alumnas. En este sentido destacan las obras de Rosa Sensat Les ciències en la vida de la llar (1923) y Cómo se enseña la Economía doméstica (1927), en las que continuamente se pone de manifiesto la interrelación entre fenómenos físicos y vida cotidiana. Estas obras, que en su día iban dirigidas a mujeres, contienen multitud de ideas que hoy en día podrían ser aprovechadas en las aulas.