TIZAS Y BORRADOR DE
PIZARRA
DE LA TIERRA AL CIELO
Creación de José Miguel Tur Pastor
Los objetos me han enviado a sitios recónditos de la memoria que he ordenado a modo de rápidos fogonazos situados en el mapa mudo de una rayuela. Un saco de recuerdos sugerentes, colocados en orden con la posibilidad de saltar en cualquier dirección y recrear otro relato, éste es el mío que se escribe con tiza y que nunca está a salvo de sobrevivir para siempre, todos se hacen borrosos e incluso desaparecen, cambian de lugar o se me ocultan para aparecer más tarde. Desde la tierra y su realidad agarrada al piso ascendemos con nuestra tiza hasta ese cielo donde se imagina y sueña.
1.- Blir du lönsam lille vän? ¿Serás rentable amiguito? Un lienzo de Peter Tillberg (1972) en el que el mensaje y título está fuera del propio cuadro, palabra sagrada escrita en una pizarra. Los niños parecen reflexionar la pregunta entre la palidez de sus caras y la desidia de sus mentes.
2.- Ellen Key visionaria pedagoga, que colocó al niño en el centro de la educación desarrollando su libertad individual, amiga de la premio Nobel Selma Lagerlöf, con un importante papel en educación. Estas dos grandes mujeres estuvieron durante treinta años manteniendo correspondencia, defendiendo las causas femenina y pacifista. Se enviaban sus libros en busca de consejos y comentarios.
3.- Selma y su Nils Holgersson volando en la oca ha representado la imagen de la libertad total, hasta acuñarse un billete con su imagen.
4.- Rudolf Steiner pionero en el uso de la pizarra como instrumento educativo y artístico, algunas de ellas se conservaron y no se han borrado.
5.- Joseph Beuys artista alemán importantísimo en la transmisión y evolución del arte de postguerra heredando de Steiner la pizarra como monumento a su práctica y como diálogo con el público.
6.- Christian Marclay artista que da el poder de la tiza en la obra Chalkboard al visitante para que se exprese con rapidez y luego un músico traduzca la impresión a sonido.
7.- Amarcord y las escuelas fellinianas me llevan a un surreal (no tanto) viaje a mi propia realidad vivida en la clase. El niño que se aterroriza al tomar la tiza o la profesora que moja las galletas en wkisky.
8.- Nunca fui un alumno ejemplar, era poco problemático, pero me dedicaba a sestear o a soñar despierto sobretodo, estaba en huelga constante…para finalmente acabar siendo profesor de arte y pedagogo en museos. Más que instrumentos pedagógicos recuerdo las tizas y el borrador como instrumentos militares. Tizas convertidas en proyectiles despertadores de niños que miraban a las musarañas. Borradores como bombas racimo que encalaban a la población de un punto estratégico de la clase.
9.- Mi tía Paqui Pastor maestra de escuela e Historiadora del Arte antes de que existiese la disciplina propiamente dicha. Su palabra siempre justa me llenó, se me grabó para llevarla siempre conmigo y siempre me trató como adulto aun siendo niño. Mujer de arrolladora personalidad, que con su ejemplo me enseñó a vivir y a descubrir que con una piedrecita se puede viajar desde el asfalto hasta el cielo de los sueños.