Aquí podéis ver un cnidocisto. Son cápsulas intracelulares con un filamento interno que se dispara por distintos estímulos. Hay varios tipos y pueden tener diferentes funciones. Los más comunes son los nematocistos, capaces de inyectar una toxina. 

Si en alguna ocasión os ha "picado" una medusa o una ortiga de mar, esta es la causa. Al tocar alguno de estos animales, habéis disparado cientos (si no miles) de cápsulas, que os han inyectado una pequeña (pero potencialmente peligrosa) cantidad de toxina.

Esta es la razón por la que no es conveniente tocar estos animales, tampoco romperlos... ya que, aun fragmentados, los cnidocistos podrían seguir activos. Si veis una medusa mejor la dejáis donde está y si son muy numerosas (enjambres) avisad a las autoridades de la playa (policía local, cruz roja, etc.) ellos sabrán qué hacer, tienen sus protocolos de actuación en estos casos. No es conveniente tampoco acercaros a zonas donde abunden las anémonas de mar.