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El grupo de investigación Procesos de desarrollo y educación en contextos familiares y escolares comienza su andadura en 1985,bajo la dirección del profesor Jesús Palacios. Si en aquel momento no llegaba a una decena las personas que lo formaban, y las líneas y los proyectos de investigación y de transferencia eran aún muy modestos, hoy podemos decir no sólo que el grupo ha crecido en cuanto al número de integrantes, sino que también lo ha hecho en lo que respecta a la diversidad y alcance de los objetivos de investigación e intervención, así como en su visibilidad nacional e internacional.

Fotografía de Nía Fernández

A pesar del tiempo transcurrido y del crecimiento experimentado, el grupo mantiene como señas de identidad lo que podemos considerar como “desiderata” de la investigación en psicología evolutiva y de la educación, es decir, aquellas características que la investigación en nuestra disciplina debería reunir idealmente y en las que no sería difícil encontrar consenso entre los académicos del área de conocimiento a la hora de reconocerlas como tales. Entre estas características están las siguientes: un planteamiento metodológico de corte longitudinal, transgeneracional y transcultural, la consideración de la persona teniendo en cuenta los contextos en los que tiene lugar su desarrollo, un análisis minucioso de las interacciones que en tales contextos se producen y de otras características que los definen, la importancia de tener presente realidades de desarrollo muy diversas, no sólo las más convencionales o normativas, sino también aquellas que incluso puedan concebirse como situaciones de riesgo y, finalmente, la conveniencia de que las investigaciones en nuestro campo puedan servir o tener como objetivo la intervención sobre el desarrollo, contribuir a la transferencia del conocimiento a la sociedad.